El lienzo charro es el lugar donde se celebran las
charreadas, viven los caballos y se entrenan los jinetes. Se le llama lienzo a
todas las instalaciones, formadas por el lienzo propiamente dicho que es de
forma alargada, el ruedo, las caballerizas, etc. Los primeros lienzos charros
se construyeron en los años veinte. Se parecían a la plaza de toros, sólo que
se le aumentó el lienzo: una extensión rectangular, destinada a suertes como
colear, manganear y pialar.
Según el reglamento oficial, el lienzo debe ser un terreno
cercado y plano, de 60 por 12 metros. El partidero, cerrado con una puerta
diagonal abatible, tiene 1.80 metros de claro y un embudo de 70 centímetros de
ancho. Debe haber cajones de 1.80 metros de largo para manejar el ganado del
coleadero, un devolvedero de 2.30 metros de ancho con cajones para jineteo,
situados a un lado de éste y junto al ruedo. También deberá tener corraletas,
para el ganado vacuno y caballar que espera entrar al lienzo. Un ruedo de 40 metros
de diámetro y su correspondiente desembarcadero para los caballos de los
charros y escaramuzas visitantes. La caseta de jueces está a 60 metros de
altura. Adentro hay un equipo de sonido, un pizarrón de calificaciones,
cronómetro y gradas para el público.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario